lunes, 11 de agosto de 2008

Suramericanos y magrebíes, los más reacios a aprender catalán

Un estudio de la Universitat de Lleida, basado en 35 entrevistas personales, revela que los inmigrantes que más valorados se sienten son también los que tienen una mejor actitud hacia la lengua catalana

  • EFE
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Los inmigrantes de origen magrebí y latinoamericano tienen, en general, una actitud negativahacia el aprendizaje del catalán, mientras que los procedentes de Europa del Este y del África subsahariana valoran positivamente esta lengua y están más abiertos a aprenderla, según un estudio de la Universidad de Lleida.

El trabajo, que ha sido financiado y publicado por la Generalitat, determina que los jóvenes de origen extranjero que más valorados se sienten en la sociedad catalana son también los que tienen una mejor actitud hacia el catalán, los que están más motivados en aprenderlo y los que lo utilizan con mayor frecuencia.

Además, este hecho "no implica el desarrollo de actitudes negativas respecto al castellano", según destacan los autores del informe, que ha sido elaborado a partir de 35 entrevistaspersonales a jóvenes inmigrantes de distintas nacionalidades de las comarcas de Lleida y Osona.

Uno de los responsables del trabajo, Cecilio Lapresta, ha precisado que los resultados de esta treintena de entrevistas son extrapolables al conjunto del colectivo inmigrante de Cataluña, al tratarse de una metodología cualitativa basada en el análisis discursivo de los participantes.

Así, "como tendencia general", los investigadores han comprobado que los jóvenes originarios deEuropa del Este y del África subsahariana tienden a mostrar unas actitudes mayoritariamente positivas hacia el catalán, pero paralelamente también hacia el castellano.

Pese a no sentirse catalanes, este colectivo utiliza habitualmente la lengua catalana y reconoce y valora la especificidad cultural y lingüística de Cataluña.

La lengua integra

"En este caso, se percibe que la vía de integración en la sociedad catalana pasa por el uso del catalán, aspecto que mayoritariamente se enfoca positivamente", tal y como indican los responsables del proyecto.

Los jóvenes magrebíes y latinoamericanos, en cambio, se caracterizan, en general, por una baja motivación por el aprendizaje y uso del catalán, ya que lo ven como una lengua minoritaria y poco útil, al considerar que el castellano cubre de manera mucho más satisfactoria este papel.

Estos inmigrantes, además, no se sienten catalanes ni españoles y perciben de manera negativa o problemática la singularidad lingüística de Cataluña, hasta el punto de que ven como una ventaja una hipotética desaparición de la lengua catalana.

"Son personas que manifiestan actitudes negativas hacia el catalán y positivas hacia el castellano", explican los investigadores de la Universidad de Lleida (UdL).

Se da la circunstancia de que los grupos de extranjeros que se muestran más reacios a aprender y utilizar el catalán son también los que no se sienten integrados ni valorados en la sociedad de acogida en cuanto a su identidad, cultura y lengua.

Perciben, en definitiva, que existe un rechazo social hacia ellos y la inmigración, lo que se traduce en un uso menor de la lengua catalana y una valoración y motivación bajas para su aprendizaje, aspectos que van acompañados de una actitud más positiva hacia el castellano.

Peligro de estereotipar

Los investigadores son conscientes de que estas consideraciones pueden llevar a "estereotipar" determinados colectivos, especialmente los latinoamericanos y los magrebíes, aunque insisten en que la percepción de la valoración social determina en gran medida, más allá del origen de la persona, la actitud que se tiene respecto al catalán.

Para romper esta tendencia, los responsables del informe proponen impulsar medidas "no estrictamente lingüísticas" que contribuyan a construir un proyecto de convivencia pluricultural y plurilingüe.

Según la UdL, uno de los escenarios principales donde se tiene que trabajar es en la escuela, poniendo en marcha prácticas educativas que fomenten un conocimiento recíproco y una valoración positiva de todas las lenguas y culturas presentes en el aula.

El trabajo de la UdL aparece publicado junto a otros diez estudios en el libro Recerca i Inmigració, editado por la Secretaría para la Inmigración de la Generalitat de Cataluña.